Holy Cross Catholic Church

Browsing Fr. Emery's Blog

5th Sunday in Lent (Spanish) - March 21, 2021

Queridos amigos,

El mensaje de Dios de hoy es claro sobre el propósito de la Pasión que Su Hijo está por experimentar; es el cumplimiento de Su promesa del Nuevo Pacto. El tiempo del exilio está por terminar, Dios le dice a su pueblo que está cambiando la forma a través de la cual mantendrá su pacto entre su pueblo. Así es exactamente como Cristo viene a cumplir la Ley y los profetas: mueve la Ley de ser externa a su pueblo y, por lo tanto, extraña y difícil de observar a una experiencia más personal de ella. A partir de ahora la Ley está inscrita en el corazón de todo hijo de Dios, porque Dios mismo la enseña a su pueblo.

Aprender de Cristo e imitarlo es el camino hacia el cumplimiento de la nueva Ley, el nuevo Mandamiento. El primer paso para cumplir el mandamiento es ser obediente a Dios y su palabra. La Carta a los Hebreos nos dice que es a través de la obediencia que Cristo se ha convertido en fuente de vida eterna para quien lo sigue. La obediencia es la virtud que nos hace rendirnos a la voluntad de Dios y confiar en Él y la única fuente de nuestra vida. La obediencia nos ayuda a descubrir la voluntad de Dios en cada evento que rodea nuestra vida, incluso el más inusual y desafiante. La obediencia a Dios permite ver la mano de Dios obrando en nuestra vida, enseñándonos a abrir no nuestros ojos humanos sino nuestros ojos de fe. Esto último nos ayudará a ver desde una perspectiva diferente los eventos y situaciones de nuestra vida y del mundo.

Pero, ¿adónde nos lleva la obediencia? Por un lado, la obediencia nos hace recordar que no somos más que un grano llamado a crecer hasta convertirse en un árbol capaz de dar frutos agradables a Dios y hacer una diferencia en el mundo. En segundo lugar, la obediencia nos enseña que para que podamos dar frutos, tenemos que morir a nosotros mismos. Este es el verdadero significado del mensaje del evangelio de hoy. Cristo nuestra Luz y nuestra Vida nos muestra el camino. Mediante la obediencia, se humilló a sí mismo y aceptó la muerte para resucitar en gloria. Asimismo, se nos recuerda que la obediencia nos llevará a reconocernos como vasos frágiles en los que está inscrita la Ley de la nueva Alianza. La ley del amor que solo se puede cumplir si aceptamos morir a nosotros mismos para compartir la gloria de Cristo en la resurrección.

Mientras nos preparamos intensamente para la celebración de la Pasión de nuestro Señor el próximo domingo, se nos invita a reflexionar más profundamente sobre lo que nos impide aceptar morir a nosotros mismos con Cristo. Ha llegado el momento en que Dios pone fin a nuestro exilio. Él nos trae de regreso a Él de nuestros vagabundeos. La Ley del Amor que significa el pacto está en nosotros y dentro de nosotros. Estamos llamados a reflexionar en nuestra vida diaria sobre los efectos de la vida bajo el nuevo pacto que ya no es externo, sino interno, en nuestro corazón y del cual nuestras palabras y obras son la expresión.

Continuemos orando unos por otros y por nuestra familia parroquial.

P. Emery

Subscribe

RSS Feed

Archive


Access all blogs

Subscribe to all of our blogs